viernes, 21 de febrero de 2014

Dope escape

Escapándole al resfrío y a la gripe, me escabullí en la radio de un amigo y despegué desde la casa del gato, en el tejado de chapa de zinc. El eter sopor, escuchando la música de del Olmo, tapó el picor de la garganta, el hastío de la mente y el dolor en el cuerpo. Santa dope. Justo ahora no tengo problemas. Encima la música repsicodélica, un temita para esta hora, justo para tipos como vos y yo. ¿Y vos quién sos? Chau pucho, listo el pollo, fuiste alpiste no exististe.